La familia es un microsistema en el que se dan diversos procesos interactivos antes y después de un divorcio o separación. En función de estas interacciones, la adaptación del niño a la nueva situación familiar después de la separación, será mejor o peor para su desarrollo evolutivo.
Juegan un papel especialmente importante los cambios de actitudes y comportamientos de los padres hacia los hijos tras la separación y el grado de acuerdo de los padres en cuanto a su crianza. También requieren atención otros aspectos como la incorporación de nuevos miembros a la familia y los cambios en las rutinas del cuidado diario de los menores derivados del conflicto conyugal.
La evaluación psicológica en procesos de custodia es uno de los roles más habituales del psicólogo forense. En ella se valoran los conflictos familiares desde una perspectiva no jurídica, humanizando un proceso que trata de resolver los problemas en situaciones personales íntimas, se facilitan las decisiones judiciales informando de forma objetiva, pertinente y clara, y se ayuda a la familia a disminuir posibles daños a los menores. derivados del conflicto conyugal.
Para la elaboración del informe psicológico se evalúan aquellos aspectos que sean relevantes a la hora de asesorar a los jueces, ya que serán ellos quienes tomen las decisiones sobre aspectos relacionados con la custodia, el régimen de comunicación y las visitas, o la patria potestad sobre los menores. Para ello se evaluarán diversas áreas como la de la personalidad y ajuste psicológico de los menores, las actitudes parentales y estilo educativo, etc.
Dicha evaluación se realizará en diferentes fases en las que será necesario además del estudio del expediente, realizar las entrevistas que se consideren necesarias con los miembros de la familia, pasar pruebas psicotécnicas y realizar observaciones. Todo ello en función de la demanda y el tipo de información que esta requiera.
En base a los resultados obtenidos en cada una de las áreas evaluadas y teniendo siempre como objetivo el mejor interés del menor, el psicólogo forense formulará las conclusiones que darán respuesta a la pregunta judicial para la que fue solicitado el informe. Es por ello que las personas que quieran solicitar una pericial psicológica por temas de custodia deben solicitarla con antelación, para poder coordinar el trabajo, ya que a diferencia de los informes clínicos, una pericial requiere de muchas horas de trabajo.
Además, los informes de custodia también facilitan información valiosa a los padres sobre como está evolucionando el niño ante los cambios producidos por la separación y cuales son los aspectos que deben tener en cuanta para protegerle de posibles futuros problemas psicológicos, y propiciar su bienestar personal y su adecuado desarrollo evolutivo.
En Martorell Abogados contamos con la colaboración de diversos psicólogos forenses cuya misión es aportar información fundamentada en conocimientos científicos asesorando así a jueces y tribunales de forma objetiva.
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